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Lección 28 – Génesis 28 & 29

Lección 28 – Génesis 28 & 29

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Génesis

Lección 28 Capítulos 28 and 29

Lee Génesis 28

Isaac, habiendo estado de acuerdo con Rebecca que la última cosa que la familia necesitaba eran más mujeres Cananeas unidas al clan por medio del matrimonio, instruye a Jacob a ir y buscar una esposa de la familia de su madre que estaba en Mesopotamia. Permítanme recordarles una vez más que el término familia, implicado aquí, no es lo suficiente para describir la estructura familiar de esa era; porque Isaac está demandando todo esto de un hijo que está a finales de sus 70 años.

Luego Isaac bendice a Jacob antes de irse con la bendición que vemos en el verso 3 y 4. No debemos apresurarnos en examinar esta bendición. Si Dios me ha mostrado algo acerca del Antiguo Testamento, es que SIEMPRE debemos mirar más de cerca cuando una bendición o una maldición son pronunciadas. Nosotros tendemos a leerlo como algo extraño pero interesante, y a veces desconcertante, dichos en una cultura distinta; pero casi sin falta son proféticas, y eventualmente vamos a encontrar un vínculo en el Antiguo testamento, o en el Nuevo.

Cuando estudiamos Génesis 27:27-29, vimos la bendición que Isaac le dio a Jacob, la BENDICION, que Esaú pensó que se le había hecho trampa; y lo que podemos ver si miramos más de cerca es que contiene solamente ALGUNO de los elementos del pacto de la promesa que Dios originalmente le había hecho a Abraham, y luego fue dada a Isaac en su totalidad. ¿Por qué? Porque, Isaac estaba en medio de una batalla real con su fe. Yo creo que podemos asumir con seguridad que Isaac no estaba completamente convencido que al que le había dado la bendición era a Esaú (lo cual nosotros sabemos que no era Esaú)……..y que él no estaba completamente complacido con el carácter de ninguno de sus hijos gemelos. Así que, o daba la bendición con poco entusiasmo, porque él no estaba convencido que su hijo iba a poder cumplirla, o él estaba deteniendo la misma hasta tanto el sintiera que era el tiempo preciso.

Muchos años atrás, cuando se le fue dado a Abraham la promesa del pacto por Dios, uno de los elementos del pacto incluía que Abraham seria el padre de una gran nación. Si nosotros miramos en Génesis 12:2, se recordarán que yo les dije que la palabra hebrea usada para “nación” era “goy”. Y, que cuándo goy es usado casi siempre significa “naciones gentiles”. Como quiera, permítanme analizar eso un poco más: en el tiempo de Abraham, el tomar la palabra “goy significaba estrictamente que no eras hebreo y no tendría significado alguno: porque hasta que Isaac nació, no había distinción entre hebreo y naciones no-hebreas. Aún cuando Abraham fue llamado el primer hebreo, no fue hasta el nacimiento de sus hijos Ismael e Isaac que fue un momento decisivo en la historia donde se requería una decisión, la diferenciación entre los hijos hebreos y no- hebreos realmente iba a ocurrir, con Isaac siendo el hebreo e Ismael y todos los otros hijos e hijas de él siendo los no-hebreos. Así que, la palabra “goy” como es usada en Gen 12:2, se refiere a tanto el hebreo como las naciones no-hebreas: naciones en general sin considerar ser hebreos o no-hebreos.

Vamos a regresar a Génesis 28:3, nosotros podemos ver lo que parece ser la misma bendición que Dios le da a Abraham, y luego Abraham le da a Isaac, y ahora está siendo transferida por Isaac a Jacob; pero hay una diferencia muy importante. Donde casi todas las Biblias dicen que Isaac le dijo a Jacob algo como “que llegues a ser multitud de pueblos…..o multitud de naciones” la palabra hebrea para “multitud de pueblos o multitud de naciones” es “kahal ammim”. Esto es completamente diferente a lo que Dios le prometió a Abraham, Y lo que le fue prometido a Isaac; es que ellos formarían “goy”…….una mezcla de naciones. La palabra “kahal ammim” en su traducción más literal es usado en hebreo como lo OPUESTO a lo que Dios le dijo a Abraham. Literalmente, “kahal ammim” quiere decir una “santa convocatoria de compatriotas”. En otras palabras, quiere decir una asamblea de gente, para propósitos santos, consistiendo de gente de la misma tribu o grupo de tribus

Jacob, pronto será llamado “Israel”, se constituirá el primero en la línea del pacto de la promesa que es formado SÓLO por hebreos. De él saldrán SOLAMENTE naciones de personas hebreas…..SOLO gente que serán llamadas por Dios, en el tiempo de Moisés, “Sus preciados tesoros”.

Permitanme resumir esto una vez más: Abraham tuvo hijos tanto hebreos como no- hebreos (según Dios le prometió en Génesis 12:2), con Isaac siendo hebreo. El hijo de Abraham, Isaac también produjo personas hebreas y no-hebreas, con Jacob siendo hebreo. Pero, Jacob produjo SOLO hebreos….todas las tribus de Israel…..lo que es exactamente lo que la bendición “kahal ammim”, una convocatoria santa de compatriotas, nos está diciendo.

Bueno, vamos a continuar, comenzando en el verso 6, se nos dice que Esaú observó que Isaac envió a Jacob a Mesopotamia para buscar esposa, porque su padre detestaba a las mujeres cananeas. Pobre Esaú; el ya había tomado dos esposas cananeas, lo cual había disgustado a su padre grandemente, y ahora en un equivocado intento de hacer compensación, él va a la familia del hermano de su padre, el tío Ismael, el hijo que Abraham había desterrado, y Esaú toma a una mujer ismaelita como su tercera esposa. Que cabeza hueca. Pero de hecho, de la manera en que este evento es contado, el efecto que va causar en el futuro sobrepasa todo cálculo. Una alianza a través del matrimonio es formada, la cual une a los dos primogénitos que han sido despojados, rechazados por Jehová como posibles herederos a la línea del pacto de la promesa, Ismael y Esaú, hacia lo que rápidamente se va a convertir en un grupo permanente de naciones anti-Israel. Es la alianza y la mezcla genética de Ismael y Esaú que forma la gran mayoría del Islam en el mundo hoy en día, y la mayoría de los árabes. Este reporte de tan pocas palabras en el verso 9, radicalmente altera el curso de la historia, y establece las circunstancias que traerán al anti-Cristo y el final de la historia como la conocemos actualmente.

Jacob se va de Beer-sheba, y viaja alrededor de 40 millas cuando él para, después de 2 o 3 días para descansar en la noche en un lugar rocoso y anónimo. Es en la Torá que encontramos a Jacob haciendo una identidad propia para él mismo, la cual permite que él sea el tercer y último Patriarca. Era necesario que dejara su tierra, padre, madre, y hermanos para que Dios trabajara en él……de la misma manera que lo hizo con su abuelo, Abraham. Allí Jacob tuvo un sueño, una visión, y en ella, se le da un vistazo del mundo Celestial espiritual. El ve ángeles, Malach Elohim, en hebreo (sepan que estos son mensajeros celestiales, ángeles) subiendo y bajando del Cielo a la tierra; recibiendo instrucciones de Dios en el Cielo y luego yendo hacer Su voluntad en la tierra. Y, allí, Dios Mismo le da a Jacob la promesa de la tierra, y de muchos descendientes, y que estos descendientes van a bendecir todas las familias de la tierra. Él también le dice a Jacob que no se preocupe, porque Dios va a estar con él dondequiera que él vaya, y EL lo traerá de regreso a la tierra, porque Él ha prometido la tierra a Jacob y a sus descendientes por siempre y va a suceder de la manera en que se le prometió. De hecho, en el verso 13 donde casi todas las Biblias dicen Dios o Señor, el original en hebreo es Yahweh……el nombre personal de Dios……así que esto fue Dios el Padre hablándole a Jacob, y Jacob estaba muy consciente de ello.

Pero, el tono de este episodio es de sorpresa; primero porque Jacob no tenía idea de que Dios iba a venir a él de esa manera, y segundo porque Jacob probablemente se sentía derrotado en ese momento. Esto no era un viaje de placer a Mesopotamia; él escapaba por su vida. Estaba dejando una escena de desastre causada por él mismo; había engañado a su padre y a su hermano para obtener la bendición, y tuvo que salir con las manos vacías sólo y buscando sobrevivir.

Esta bendición sobre Jacob representaba la transferencia oficial del pacto de la promesa de Isaac a Jacob. Jacob había sido bendecido unos días antes con una bendición similar a la bendición de su padre, pero solo AHORA Jehová valida esas bendiciones.

Date cuenta también que desde nuestro estudio de la Torá comenzando con Génesis 1, hemos visto cómo Dios transfiere Su lugar de residencia del Cielo a la Tierra, en el Jardín del Edén, y luego regresa al cielo otra vez. Y, no pasemos rápidamente esta “escalera”, o mejor dicho escaleras entre el Cielo y la Tierra: ya que esto es otro “tipo” Bíblico de algo que ha de venir: como puedes ver estos dos hechos trabajan juntos. Estas escaleras representan la conexión entre el hombre y Dios que en ese momento estaba roto. En el principio, el hombre podía venir directamente a Dios, porque Dios habitaba CON el hombre. Pero la rebeldía y el pecado rompió la conexión, y Dios se apartó de regreso al Cielo. Sin embargo, para aquellos que confían, hay una escalera, las escaleras, por la cual Dios envía sus ángeles representantes hacer Su trabajo en la Tierra. Más tarde, otra conexión entre el cielo y la tierra va a venir, el tabernáculo del desierto. Aún así, en el futuro, la escalera verdadera iba a venir; el ÚNICO que iba a reconectar a Dios con el hombre, Yeshua. ¿Acaso piensas que eso es solo una alegoría o una bonita historia? Escucha lo que Jesús Mismo dice en Juan 1:51: “ …De cierto de cierto les digo que de ahora en Adelante verán el Cielo abierto, y a los ángeles de Dios ascendiendo y descendiendo hacia el Hijo del Hombre.

Oh, cuanto podemos perder por no estudiar minuciosamente la Torá. Porque sin antes ver lo que le sucedió a Jacob, aquí, en Génesis, ¿cómo íbamos a entender completamente este tipo de comentario hecho por Jesús 1800 años más tarde, en lo que llamamos el Nuevo Testamento? Pero, qué fácil se nos hace conectar una vez conocemos ambos. Para Jacob esto era una realidad Y una profecía. Para nosotros, esto no es solo una realidad, es una profecía cumplida . Yeshua es nuestra escalera, la ÚNICA escalera que nos vuelve a conectar con Dios. Es sobre ÉL que los ángeles ascienden y descienden, hoy, en nuestros tiempos.

Jacob estaba verdaderamente atónito ante lo que se le había mostrado. El llamó al lugar “casa de Dios”, o como nosotros lo conocemos Beth-el…..beth, casa…….el, Dios. O dicho de una manera más correcta, el Beit-el, lo cual quiere decir, “la Casa del Dios El”. Observa el uso de la palabra El antes del éxodo de Egipto. Porque no fue hasta tanto que Dios le da su nombre personal a Moisés en el Monte Sinaí, Dios siempre era conocido como El Shaddai….poniendo énfasis en la parte El. En otras palabras, antes del Monte Sinaí, nadie sabía el nombre personal de Dios. Así que él era conocido por un número de títulos, y casi todos comenzaban con IL o EL. Después del Monte Sinaí, vamos a ver que el uso de la palabra EL comenzó a disminuir, y lentamente comenzó a ser remplazada por Jehová.

Hay otro evento interesante que sucede aquí que nosotros deberíamos observar: y es cuando Jacob unge la roca en la cual él se recostó para dormir cuando tuvo la visión. ¿Cuál es el significado de esto? Bueno, primero que nada, podemos ver cuán antiguo es este concepto de ungir con aceite, ya que esto sucedió alrededor del 1,800 antes de Cristo. El significado exacto de lo que esto significaba en la mente de Jacob no está claro, pero obviamente tenía algo que ver con su encuentro con Dios. Probablemente quería decir el establecer un nuevo lazo de pacto entre Jacob y Jehová, uno que involucra un voto; porque era desconocido en ese tiempo el usar una piedra como un poste indicador de un monumento después de ungirlo con aceite (y, nosotros tampoco lo vamos a encontrar en la Biblia con ese propósito). El ungir con aceite era un uso bastante generalizado en esa época, y en ocasiones marcaba el hacer un acuerdo, no como los pactos de sal más extensos que requerían el sacrificio de un animal. El marcar límites y crear postes indicadores de un monumento usando una roca (se llamaban Piedras Paradas o en alto) era también muy común…..pero esas no eran ungidas con aceite.

Aún así, yo pienso que esto es mucho más profundo. Aquí tenemos a Jacob descansando en una roca, y luego ungiéndola; yo pienso que hay un posible enlace entre esto y el Mesías, porque Mesías quiere decir, en hebreo, el ungido. Uno también debe de inquirir porque Yeshua en ocasiones es referido como…..de todas las cosas…..una roca. Ahora ciertamente, alegóricamente, nosotros podemos ver características físicas de estabilidad, firmeza de una roca y aplicarlo a Yeshua. Pero, debemos recordar que el contexto del Nuevo Testamento es tan hebreo como el contexto del Antiguo Testamento. La gente judía no usaban cualquier metáfora; era una sociedad Antigua, tradicional que tenía una enorme historia de significados muy bien establecidos en los eventos del pasado, particularmente los que involucran a los Patriarcas. Yo seriamente sospecho que el llamar a Yeshua la “roca” se refiere a este evento con Jacob, por medio del cual el ungió la roca donde recostaba su cabeza.

Jacob promete a Dios que Él va a rendirle toda lealtad a ÉL…..y que de todo lo que Dios le dé a él, él va darle una décima parte. Una vez más, nosotros podemos ver el principio de los diezmos muy temprano en las escrituras.

LEE GÉNESIS 29

Cuando Jacob deja a su familia en Beer-Sheba, iba con una agitación espiritual, con un corazón pesado, temor y agitación, culpa…… Pero, luego de su encuentro con Jehová, algo cambió en él. estaba más seguro, calmado, centrado….estaba lleno de ese estado interno que los gentiles llaman “una paz que sobrepasa todo entendimiento”. Los hebreos dirían que él recibió el Shalom de Hashem.

No sabemos cuánto tiempo le tomó a Jacob el llegar a Harán, un viaje de aproximadamente 400 millas de la parte sur de Canaán. Pero, cuando él llegó inmediatamente fue en busca de la familia de su madre. A veces nosotros nos concentramos en la tierra de Canaán, la tierra prometida que eventualmente iba a ser Israel, que se nos olvida la conexión ancestral entre la tierra prometida y Mesopotamia. Mesopotamia era el lugar de nacimiento de Abraham; y una gran parte de su familia permanecía ahí. Encontramos que Abraham envía a un siervo a lo que él consideraba sus raíces, para buscar una esposa apropiada para su hijo Isaac. Y, ahora Jacob va de regreso exactamente al mismo lugar, con el mismo propósito. Pero, qué contraste entre cómo Eliezer, el siervo de Abraham, llega a Harán, versus cómo llegó Jacob. Eliezer llegó con una escolta de hombres, camellos, y regalos para ofrecer a la futura esposa para Isaac. Jacob llega sólo con una mudada de ropa, y nada más. Su búsqueda es recompensada en el pozo, donde 3 rebaños de ovejas esperaban para tomar agua; los pastores señalan a Raquel, prima de Jacob, la sobrina de su mamá, hija de Labán.

Aprendimos un poco acerca de cuáles eran los procedimientos en aquellos días de los pozos de agua. Los pozos de agua eran lugares importantes porque incluía mucho trabajo perforar uno, y requería mucho cuidado su mantenimiento. Aún más, el pozo le pertenecía a alguien; podía ser el rey del área, o en este caso, una familia local. Y debido a que las personas que se habían establecido en esa área y para el cual el pozo había sido cavado necesitaban agua…….y los animales que eran parte de sus vidas también tenían que beber agua regularmente……el pozo vino a ser un lugar de reunión para la gente del campo, al igual que las puertas de la ciudad eran el lugar de reunión para la gente de la ciudad.

Encontramos que había una piedra grande sobre la abertura del pozo. Esto era normal, una costumbre; primero, era para resguardarlo del polvo, pequeñas alimañas, y aún de niños que podrían caer dentro del pozo y contaminarlo. Pero, también era para mantener alejadas a las personas que querían utilizar el agua. El agua debía de ser comprada al dueño del pozo. Los pastores con sus rebaños de ovejas esperaban hasta la tarde, cuando el dueño del pozo llegaba, movía la piedra, y cobraba una tarifa a cada uno de ellos; luego sus animales podían beber del agua.

En nuestra escena, Jacob quiere que los pastores les den agua a los animales y se vayan, para así poder tener una conversación privada con los miembros de la familia que él ha venido a buscar. Así que, como Jacob es familia, él se siente con derecho para remover la piedra del pozo y permitirles a las ovejas que tomen agua…..y luego los pastores se retiren.

Jacob se presenta a Raquel, y como es costumbre, besa al miembro de la familia. El besar en esa época no necesariamente denota sexualidad o afecto. El beso era un saludo, generalmente el equivalente a darse la mano, hoy en día, aún cuando usualmente no era hecho entre extraños. Entonces Jacob llora de alegría sabiendo que su jornada había terminado y que probablemente había conocido a su futura esposa. Era un buen día. Se nos dice que Raquel era una pastora, esto no era un trabajo usual para una mujer en esa área del mundo; las mujeres beduinas del Sinaí y de la Península de Arabia, ciento de millas al sur, en ocasiones cuidaban los rebaños y las manadas……pero las mujeres de Mesopotamia y eventualmente Israelitas no acostumbraban hacer esa clase de tareas.

Labán, el papá de Raquel, se entera de la llegada de Jacob y viene a conocerlo. Esto es un buen momento para nosotros entender algo que los estudiosos identifican como una “contradicción” en la Biblia. En el verso 5, cuando Jacob pregunta sobre la familia de su madre, él le pregunta algunos pastores si ellos conocen a “Labán, el hijo de Nahor”. En capítulos anteriores de Génesis, se nos dice que Laban es el hijo de B’tuel, no Nahor. Bueno, Nahor es realmente el abuelo de Labán. Y, lo que se describe aquí es a cual CLAN Labán pertenece….el clan de Nahor. En ocasiones cuando obtenemos identidades más formales en la Biblia, va a decir “de la tribu de tal y tal, y el hijo de x persona”. Hijo de, no necesariamente quiere decir una relación biológica de padre e hijo como nosotros lo pensamos. A veces si quiere decir padre e hijo, pero en ocasiones está uniendo a una persona con su clan, como lo está haciendo aquí. Es saber quien es quien y está en contexto, y es la expectativa del autor que el lector sepa bien que Nahor es el hermano de Abraham, y Labán es su nieto. Así que, estas supuestas contradicciones de nombres no son contradicciones; era solo la manera normal de hablar de ellos y explicar la identidad propia de esa época.

Por supuesto que Labán ofrece su hospitalidad a su sobrino. Pasa un mes y el interesado de Labán aborda a Jacob con la pregunta: ¿Cuál será tu salario? Esta es la señal que es entendido que Jacob es una visita semi-permanente. Y claro que Labán ve a Jacob como una adición valiosa a la familia, ya que él es un pastor muy talentoso y un buen trabajador. Él lo más probable también notó que Jacob estaba impresionado con la belleza de Raquel. Jacob ofrece 7 años de su a Labán a cambio de la mano de Raquel. Es importante saber, que no era acostumbrado en esa era prácticamente vender a su hija a cambio de servicio. Y, un poco más tarde vamos a ver que las dos hijas de Labán revelan la vergüenza que sintieron por ser, casi literalmente vendidas por un precio cuando dicen en Génesis 31:14,15, “No nos considera cómo extrañas” puesto que él (Labán, su padre) nos vendió.

Bueno, los 7 años pasan, y Jacob va a Labán para cobrar su “salario”, el cual no es nada más que Raquel. Entonces, Jacob obtiene una prueba de cuan devastador el engaño puede ser: después de la ceremonia de la boda, Labán cambia a Raquel por Lea, su hija mayor y soltera. No hay duda, que Jacob, instantáneamente pensó en aquel día en el cual se hizo pasar por su hermano y engañó a su padre; el debió haber asumido que lo que él estaba experimentando era simplemente castigo por lo que le había hecho a su padre, Isaac y a su hermano unos años atrás. De hecho, la palabra ENGAÑO toma lugar en esta historia de Jacob adquiriendo una esposa, porque está orgánicamente conectado al tema central de ENGAÑO en la historia de Jacob robando la bendición de Esaú.

Así que, a cambio de otros 7 años de servicio a Labán, Jacob obtiene a Raquel, con la cual se casa inmediatamente después de la ceremonia de 7 días acostumbrada. Este hombre de edad avanzada, probablemente de 80 años, de repente se encuentra en la posición de complacer no a UNA sino a DOS esposas.

Otro lado oscuro de Jacob se nos es revelado a nosotros, en el cual él injustamente, y abiertamente favorece, a Raquel más que a Lea. La razón es sugerida en el verso 17, donde dice que mientras “los ojos de Lea eran delicados”; debido a que la belleza en ocasiones se relaciona con la apariencia de nuestros ojos….particularmente entre las culturas del Medio Oriente…..ojos fuertes o delicados eran modismos que indicaban belleza o fealdad. Así que, lo que se nos dice es que Raquel era considerada hermosa mientras que Lea no; y aparentemente se basaba en la belleza física que Jacob tomó esa decisión. NO hay referencia alguna que Jacob consultó a Dios para escoger a su esposa. Y, hay muchas razones para sospechar que Lea debió de haber sido la escogida en vez de Raquel, como veremos pronto. Que ironía: Esaú, el primogénito, guapo y macho, fue ignorado por Dios a cambio de Jacob quien era callado y sencillo. Raquel, bella e impetuosa, fue ignorada por Dios por Lea, callada y sencilla. ¿Por qué digo que Raquel fue ignorada? vamos a ver lo que sucede después.

Casi inmediatamente, Lea comienza a darle hijos a Jacob. Raquel aparentemente no puede quedar embarazada. Primero, Lea concibe a Rubén…..el primogénito de Jacob. Pon este detalle en tu memoria porque en unas pocas semanas vamos a regresar a ello. Ella le da a Jacob 3 hijos más: Simeón, Leví, y Judah. Al nombrar estos hijos Lea le da toda la gloria y alabanza a Dios: Rubén significa “mira un hijo” porque ella se sintió que Dios había visto que ella era tratada como una ciudadana de segunda clase por Jacob, quien adulaba solo a Raquel. Simeón significa “escuchar”, porque Dios escuchó sus oraciones para tener otro hijo. Leví significa “unido” porque ella esperaba como le había dado a Jacob otro hijo, Jacob la iba amar más. Y, Judah significa “alabanza”, porque ella alababa a Dios por bendecirla con 4 hijos saludables.

Al ofrecerle su alabanza a Dios por estos hijos, Lea estaba mostrando su carácter. Y, es por eso que Dios la estaba bendiciendo. No solo le dio a Jacob el primogénito, sinó que mira a los otros dos: Leví y Judah. Lea, la sencilla, fue honrada al cargar y dar a luz la línea de sacerdotes israelitas y siervos de Dios…..los Levitas; y al traer a Judah al mundo, de donde la línea de la promesa iba a ser cumplida en Jesús. Ya que Yeshua era de la tribu de Judah….nosotros llamamos a los descendientes de Judah, Judíos.

En un triste final en este capítulo, se nos dice que Lea repentinamente pierde la habilidad de tener hijos.